Quizá has visto a tu perro comer hierba y no sepas la causa. Puede que te preguntes: ¿Debo preocuparme o se trata de una conducta normal sin mayor importancia?
Las hipótesis de por qué los perros comen hierba son muy diversas: purgarse por estar parasitados, molestias gastrointestinales, necesidad de vomitar, tienen hambre, estrés… La verdad es que no es fácil encontrar información que nos saque de dudas y que señale uno de estos factores como causa principal de este comportamiento. Lo que sí podemos decir es que se trata de una conducta normal en los perros y que no necesariamente debemos ir corriendo al veterinario ni desparasitarlo lo antes posible.
Entonces, ¿por qué lo hacen? Vamos a comentar algunas de las hipótesis que hay al respecto.
Provocar el vómito y malestar gastrointestinal
Si nuestro perro ha vomitado después de comer hierba, puede deberse a dos razones. Por un lado, es probable que una sensación de malestar a nivel digestivo incite al perro a realizar ese comportamiento para vomitar y sentir alivio. En este caso, aunque quizá no lo haga de manera consciente, podríamos decir que el vómito es la consecuencia “esperada” por nuestro perro al comer hierba. Por otro lado, cabe la posibilidad de que el vómito sea simplemente la consecuencia de la propia ingesta (por la irritación que provoca la hierba en la mucosa gástrica) sin un propósito inicial aparente.
En la mayoría de los casos, no se produce el vómito tras comer hierba ni los perros padecen una enfermedad gastrointestinal previa. Pero debemos mencionar que el vómito sí se da con más probabilidad si el perro muestra signos de enfermedad digestiva antes de la ingesta.
Parásitos gastrointestinales
Esta es una de las razones más populares cuando hablamos de por qué los perros comen hierba. Quizá por ser muy llamativo el hecho de encontrar heces con restos de hierba y parásitos, no solo en los perros, sino en otras especies silvestres como el zorro y el lobo, entre otras.
Parece evidente que el efecto mecánico de arrastre que ejerce la hierba en el intestino de animales parasitados, ayuda a la eliminación de, al menos, una porción de los parásitos adultos alojados en el tracto digestivo. Quizá, el malestar intestinal derivado de la parasitación induce a los perros a ingerir hierba. Existen evidencias de que los cachorros, más predispuestos a sufrir parasitaciones, suelen realizar este comportamiento con mayor frecuencia que los perros adultos (¡pero también sabemos que son más curiosos y exploran más con la boca para conocer el mundo de su alrededor!).
Pero, se sabe con certeza que los perros ingieren hierba aunque no estén parasitados, por lo que podemos descartar esta causa como la única responsable de este comportamiento. Si encontramos heces con hierba y parásitos, podemos pensar que se trata de una casualidad o que la naturaleza es realmente sabia.
Hambre
Otra razón que se baraja es la simple sensación de hambre. En algunos estudios se ha comprobado que existe una relación entre la ingesta de hierba y el momento con mayor sensación de hambre, sugiriendo que los perros utilizan la hierba para sentirse saciados.
Es frecuente que los perros coman hierba especialmente cuando está húmeda con el rocío de la mañana. Podríamos pensar que tienen hambre, sed o que simplemente les gusta la hierba fresca.
Se sabe que son selectivos a la hora de comer hierba y no comen cualquiera porque sí. ¿Les gustará más el sabor de una que de otra? ¿Buscan alguna propiedad en concreto? Nos podríamos hacer muchas preguntas al respecto.
Hablando de comer, lo que sí se sabe es que la dieta de los perros no influye en que coman más o menos hierba, es decir, pueden hacerlo indiferentemente de si comen pienso, dieta cruda o dieta cocinada.
Estrés
La presencia de estrés en los perros es cada vez más conocida y aceptada por la sociedad. Pero, ¿puede el estrés hacer que mi perro coma hierba?
Es probable que hayas vivido alguna situación con tu perro como la siguiente:
Voy paseando con mi perro y en un momento determinado nos encontramos con otro perro. Se empiezan a saludar y su comunicación nos indica que existe tensión entre ellos y que no están especialmente cómodos. Mi perro decide continuar con el paseo, pero a los pocos metros se detiene y empieza a comer hierba. ¿Te ha pasado algo parecido?
Es poco probable, aunque no imposible, que a tu perro le haya entrado hambre o que sienta malestar por los parásitos. Pero sí es probable que la situación anterior haya desencadenado esta conducta. ¿Por qué?
A priori, podemos considerar varias posibilidades de manera hipotética. Por un lado, podemos estar ante una conducta de “descarga emocional”. De una manera muy resumida, estaríamos hablando de “hacer algo” que le ayude a gestionar el estrés que esa situación le ha provocado. También podría, por ejemplo, escarbar o coger un palo.
Por otro lado, los efectos que el estrés provoca en el organismo a nivel fisiológico son muy conocidos. Algunos procesos involucrados, como la liberación de corticoides o catecolaminas, provocan, entre otras, alteraciones a nivel gastrointestinal (cambios en la motilidad, aumento de la percepción visceral, disminución del flujo sanguíneo, cambios en las secreciones, reducción de saliva…).
Teniendo en cuenta todo esto, además de otros procesos relacionados con el sistema nervioso entérico (¡el sistema digestivo es el segundo cerebro!), podemos decir que los cambios fisiológicos que produce el estrés, pueden llevar a nuestro perro a comer hierba en un momento determinado.
Entonces, ¿por qué mi perro come hierba? ¿Dejo que lo haga?
Puede que todas las hipótesis tengan su parte de razón. Es probable que este comportamiento tuviera más sentido cuando lo realizaban sus antepasados y que haya perdurado hasta el día de hoy.
Puede que simplemente lo hagan por puro placer y los humanos nos hagamos más preguntas de la cuenta.
Comer hierba es una conducta normal en los perros y, siempre que sea posible, podemos permitírselo (a no ser que sospechemos que esa hierba lleva algún producto químico como: herbicidas, plaguicidas, fungicidas…).
Si crees que tu perro lo hace en una frecuencia o cantidad excesiva, o con mucha ansiedad, quizá sí debas hacerte más preguntas y consultar con un veterinario y/o educador canino.
Saber identificar si un comportamiento de tu perro es normal o no, pasa por conocerlo como especie y como individuo. En ello te queremos ayudar desde El Perro Limón.